¿Qué es la formación y el desarrollo?

Con el objetivo principal de formar y desarrollar a los empleados, el área de formación y desarrollo actúa conjuntamente con los objetivos estratégicos de la empresa.

Difundir y arraigar la cultura de una organización, formar y desarrollar competencias específicas para aumentar el rendimiento de sus empleados y, en consecuencia, ofrecer mayores oportunidades de aprendizaje son las principales funciones del área.

¿Qué significa tener un área de Formación y Desarrollo en su empresa?

La eficacia de las organizaciones, las personas y los equipos tiene una implicación directa con el área de Formación y Desarrollo.

También es un área intrínsecamente vinculada a la gestión de personas, la gestión del talento, el desarrollo de los recursos humanos, el diseño instructivo, los factores humanos y la gestión del conocimiento.

Hablar de Formación y Desarrollo, es también hablar de su relación con los cambios dentro de las empresas, ya que desarrollan una formación específica conectada a las estrategias organizativas.

¿Quiere saberlo todo sobre esta importante área? ¿Pero todo?

Entonces quédese, ya que este será el artículo más completo sobre Formación y Desarrollo que jamás haya leído.

Se reunirá:

• ¿Cuál es la diferencia entre Formación y Desarrollo?
• Etapas de formación y desarrollo;
• ¿Por qué tener un área de Formación y Desarrollo en su empresa?; y
• ¿Por qué formar a los empleados?

¿Cuál es la diferencia entre Formación y Desarrollo?

Aunque siempre nos referimos a ellos juntos, y por lo tanto los imaginamos como una misma cosa, la formación y el desarrollo tienen significados diferentes.

¿Qué es la formación?

La formación es un proceso de aprendizaje en el que los empleados tienen la oportunidad de desarrollar las habilidades, competencias y conocimientos que requiere su área de especialización en un corto periodo de tiempo.

Cuando un empleado es nuevo en la empresa, recibe una formación inicial, también llamada de integración , que está relacionada con el área en la que trabaja para que su rendimiento sea satisfactorio y para que pueda contribuir más al crecimiento de la organización.

La formación de integración también se utiliza para transmitir normas, políticas y procedimientos con el fin de orientar el comportamiento y las actitudes de acuerdo con las necesidades de la empresa.

Los beneficios incluyen:

• Aumento de la productividad, tanto cuantitativa como cualitativamente;
• Desarrollo de habilidades;
• La mejor actuación;
• Hace que el ambiente de trabajo sea más cooperativo;
• Mejora el clima organizativo;
• Disminución de la rotación de personal;

¿Qué es el desarrollo?

El desarrollo es más amplio y se centra en el crecimiento de los empleados y en su rendimiento futuro.

Es un proceso educativo que se preocupa por el crecimiento global de cada empleado y está orientado a la carrera profesional a largo plazo y no al presente.

El desarrollo no se limita a una tarea concreta, sino que pretende mejorar su personalidad y actitud, lo que les ayudará a afrontar los retos posteriores.

Esto cambia la mentalidad de los empleados y los hace más desafiantes o competitivos.

Etapas de formación y desarrollo

La formación y el desarrollo tienen varios pasos para ser eficaces y generar los resultados deseados en términos de mejora de conocimientos, habilidades y actitudes.

Estas etapas actúan como un ciclo, ya que debe supervisar constantemente la estrategia de formación y desarrollo aplicada.

Si alguna vez ha pensado en desarrollar un programa de formación en su organización, considere los siguientes cinco pasos básicos de formación. Comprobará que los cinco pasos son mutuamente necesarios para que cualquier programa de formación sea eficaz y eficiente.

1. Determinar la necesidad de formación y desarrollo para individuos o equipos

• Se realiza una evaluación de las necesidades de formación a nivel organizativo, individual o de los empleados y a nivel departamental/funcional;
• Una vez identificado el grupo objetivo, hay que analizar el hueco que hay que cubrir con la formación;
• Desarrollar objetivos y metas de formación específicos para conseguir mejoras cuantificables en sus niveles de rendimiento y mejorar los conocimientos relacionados con el trabajo.

2. Desarrollar los objetivos

Una vez identificadas las necesidades, es el momento de establecer los principales objetivos de formación y desarrollo.

Podemos nombrar algunos como el aumento de la eficiencia en los procesos, el aumento de la motivación y la participación de los empleados, la reducción de la rotación, la gestión de riesgos, el desarrollo de nuevas habilidades.

3. Seleccionar los métodos de formación

Sólo después de establecer las necesidades y los objetivos podrá determinar qué metodología se aplicará a su formación:

Presencial: método más tradicional, que utiliza un aula e instructores;

Interactivo: con grupos de discusión, análisis de casos, y puede ser presencial o en línea;

Formación práctica: fomentan la participación activa de los alumnos;

E-Learning (EAD): La formación se realiza a través de cursos en línea mediante una plataforma ead.

4. Dirigir y aplicar los programas para empleados

Esta es la fase en la que se aplicará el método de formación.

Es el momento en el que se produce efectivamente la formación, preparada según la necesidad, los objetivos y los métodos determinados.

5. Evaluar los resultados y el rendimiento tras las sesiones de formación y desarrollo.

Momento de evaluar la aplicación de la formación y verificar los resultados obtenidos.

Es el momento de identificar si su formación estaba bien estructurada/desarrollada, si el método era adecuado, la eficacia de la formación y medir si el retorno de la inversión en formación (ROI) era satisfactorio.

Es importante seguir los pasos mencionados anteriormente, porque el proceso de formación y desarrollo debe ser una acción constante de evaluación de la empresa en su conjunto.

Es necesario seguir este ciclo para poder identificar inmediatamente las necesidades y así poder trabajar en ellas.

¿Por qué tener un área de Formación y Desarrollo en su empresa?

La formación es crucial para el desarrollo y el éxito de la organización.

He aquí algunos beneficios importantes de la formación y el desarrollo:

Mayor productividad y mejores resultados

La formación y el desarrollo están directamente relacionados con el aumento de la eficiencia y la productividad de los empleados.

Los empleados se mantienen al día con las nuevas tecnologías y mejoran sus conocimientos.

Los empleados bien formados muestran un rendimiento en cantidad y calidad.

Hay menos pérdida de tiempo y recursos cuando hay una formación adecuada.

Menos intervención del líder

Los empleados se encargarán de las tareas de forma más independiente, es decir, cuando un empleado está bien formado estará más familiarizado con el trabajo y, por tanto, necesitará menos supervisión.

Reducción de errores y accidentes

La mayoría de los errores se producen por la falta de conocimientos y habilidades necesarios para realizar un trabajo específico.

La formación y el desarrollo continuos garantizan que los empleados adquieran las competencias adecuadas en el momento oportuno.

Cuanto más formados, menos posibilidades de cometer errores en el trabajo y en la gestión de la seguridad, gracias.

Desarrollar nuevos talentos

La formación desarrolla a las personas y las capacita para ocupar puestos de liderazgo.

Además, es una forma de identificar a los nuevos líderes a través de los informes de rendimiento de la formación.

La formación impartida en plataformas de educación abierta aporta este tipo de información a través de los informes de seguimiento de los alumnos.

Satisfacción en el trabajo

Los empleados se sienten más satisfechos cuando reciben formación y así desarrollan su capacidad profesional.

Existe un sentimiento de pertenencia a la empresa para la que trabajan, además de reducir la rotación y el absentismo, ya que la rotación de personal cuesta tiempo y dinero.

Cómo abordar la ineficacia de los empleados

Las ineficiencias pueden trabajarse mejor o incluso eliminarse mediante una formación específica, reforzando las competencias y eliminando las barreras internas.

Un programa de desarrollo bien organizado ayuda a los empleados a adquirir habilidades y conocimientos, llevando a todos a un nivel uniforme y avanzado.

Mayor coherencia

Un programa de formación y desarrollo bien organizado proporciona a los empleados conocimientos y experiencia continuos.

El acceso a la formación periódica garantiza que todos los empleados tengan una experiencia y un conocimiento constantes de las tareas y los procedimientos, algo que es especialmente importante cuando se trata de las políticas y los procedimientos básicos de la empresa.

Mayor interacción del equipo

La formación y el desarrollo influyen en el trabajo en equipo, el espíritu de equipo y la colaboración entre equipos.

Optimización de recursos

Permiten desarrollar las competencias técnicas y de comportamiento de los recursos humanos de una organización, lo que permite utilizar los recursos de forma más óptima, así como ayudar a los empleados a lograr su crecimiento personal.

Además de los beneficios mencionados, la formación y el desarrollo conducen a la mejora de la rentabilidad y a una actitud más positiva hacia la orientación de los beneficios, pero también ayudan al desarrollo organizativo, es decir, la organización consigue una toma de decisiones y una resolución de problemas más eficaces.

La formación y el desarrollo ayudan a comprender y ejecutar las políticas de la organización, desarrollando la capacidad de liderazgo, la motivación, la lealtad, la mejora de las actitudes y otros aspectos que suelen presentar los empleados y directivos de éxito. La formación y el desarrollo demuestran el compromiso de mantener a los empleados a la vanguardia de los conocimientos y la práctica.

¿Por qué formar a los empleados?

Unos buenos programas de formación y desarrollo ayudan a retener a las personas adecuadas y a aumentar los beneficios.

A medida que la batalla por los mejores talentos se vuelve más competitiva, los programas de formación y desarrollo de los empleados son más importantes que nunca.

Contratar a los mejores talentos lleva tiempo y dinero, y la forma de involucrarlos y desarrollarlos desde el momento en que se incorporan afecta a la retención y el crecimiento de la empresa.

Y no se trata sólo de retener. Los programas de formación y desarrollo de los empleados afectan directamente a su cuenta de resultados.

Los beneficios y el valor de la formación y el desarrollo actúan como un efecto multiplicador.

Desarrollar es construir la personalidad y la actitud del empleado para afrontar los retos futuros. Por lo tanto, ambos son vitales para un empleado, ya sea nuevo o existente.

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